Aunque la “Verdadera Vocación” es sinónimo del “llamado interior” y muchos sienten el “llamado de su voz interior” como algo tan o más concreto que el suelo sobre el que pisan, no todos pueden identificarla con claridad…¿Cómo fue mi propio camino desde mi propio “llamado interior” hasta crear un método para descubrir y construir el camino hacia la Vocación?
Hace ya varios años decidí emprender una investigación sobre el “llamado de la voz interior” que más tarde confirmaría no sólo el sinónimo con la “Vocación” sino una perspectiva mucho amplia….Verdadera Vocación
Tal vez uno de los misterios más cercanos y menos buscados. Conocer quienes verdaderamente somos para poder llevar nuestra verdadera voz al mundo.
En mi vida hubo varios momentos de cambios importantes: decidir dejar un trabajo de 10 años en una empresa multinacional, cambiar profundamente mi alimentación dejando de comer animales, decidir emprender un proyecto editorial en el ambiente orgánico y sustentable, mudarme a otra provincia para colaborar con el nacimiento de una comunidad, educar a nuestro hijo especial en casa o justamente el decidir enfocarme más en el trabajo con personas y sus proyectos con alma… todos esos cambios solo fueron posibles porque respondí a mi propia voz interior. Decisiones importantes que fueron forjando un “músculo”, una forma de identificar y expresar ese llamado interior.
Trabajando con emprendedores del ambiente orgánico y sustentable durante muchos años me di cuenta que muchos de ellos “no conectaban” su proyecto con lo que realmente eran. Sentían afinidad con algunas temáticas pero sus proyectos no los representaban esencialmente.
Entonces me preguntaba si sería posible colaborar en esta “conexión”, este reconocimiento de su propia “esencia” para poder expresarla más tarde en sus “proyectos”. Lo que era natural para mi ¿Podría ser para otros?
La primera confirmación llegó desde un profesor del MIT llamado Otto Sharmer que justamente “daba en la tecla” de mi pregunta, respondiéndola de una manera bien simple y contundente a la vez:
Conocemos bastante sobre lo que los líderes hacen y cómo lo hacen.
Pero sabemos muy poco acerca del espacio interior, el origen desde el cual operan.
La naturaleza de este espacio interno en líderes es un misterio para nosotros”. (Abordando el punto ciego de nuestro tiempo.)
Pum! El lugar interno desde el cual operan….Nunca lo había escuchado de una forma tan clara. Eso era lo que estaba buscando, develar ese lugar interno tan especial que nos puede llevar a expresar lo que verdaderamente somos.
Un tiempo después me di cuenta de algo sorprendente que me motivó a escribir un artículo y una historia llamada “El caso Laura: A los 35 años todos somos expertos en algo, pero en el fondo no sabemos en qué” Caí en la cuenta que existe algo interno que manifestamos sin darnos cuenta. ¿Cómo es esto? A ver, entre los 25 y los 35, durante 10 años, sin lugar a dudas nos hemos especializado en algo y hasta seguro trabajamos y nos pagan por eso….pero no sabemos qué es lo que está detrás, qué es lo que sostiene esa capacidad por la que somos valorados…..La llamo “cualidad esencial.”
Todos tenemos una “cualidad esencial” que nos lleva a expresarnos de una forma particular. Reconocemos la “forma”, en lo que somos buenos haciendo algo, pero es más difícil ver la “esencia”, que sustenta todo.
Con esta convicción y enfoque asesoraba intuitivamente a emprendedores pero muchas veces no alcanzaba a tener la certeza de si lo que estaba haciendo era realmente lo correcto. ¿No estaría asesorando desde mi vivencia, muy válida, pero finalmente mía, en vez de hacerlo desde lo que ellos realmente eran? Emprendedores me buscaban por lo que había logrado pero…sería válido para ellos? El enfoque era correcto sin lugar a dudas… pero faltaban herramientas…Me preocupaba ofrecer una ayuda real, algo verdadero…
Fue así que emprendí una profunda investigación para intentar identificar con claridad y precisión de qué se trataba este “llamado”, esa “voz” que persistentemente marcaba el camino desde la que había tomado las decisiones más transcendentes…. pero sobre todo para intentar trazar un camino claro que me permitiera ayudar a otros… desde ese lugar más esencial….
Y claro, cuando uno busca encuentra, pero habitualmente lo que encuentra no es lo que imaginaba…
Fue así que apareció frente a mí el concepto, la idea que definía lo que estaba buscando, le daba claridad, marco y una proyección mucho más amplia que la prevista:
Verdadera Vocación
Siempre había estado buscando esto: la verdadera Vocación…
Pero, claro, junto con la claridad aparecieron los desafíos.
¿Cómo explicar que la “Verdadera Vocación” no tenía nada que ver con lo que se suele interpretar con vocación?… y más aún ¿Cómo explicar que la verdadera vocación está en el alma?
Bueno, la alegría de haber encontrado era más grande que los obstáculos… entonces comencé a escribir, a dar charlas y talleres en los que me propuse llevar a la palabra Vocación a su verdadero lugar. Sacarla del “sótano” y llevarla a lo alto, a donde se merecía estar…
Entonces, tenía 2 desafíos, primero desmitificar las ideas más habituales sobre la Vocación: que la vocación es para los jóvenes, que es una carrera, profesión o trabajo y que se descubre con un test. ( Los 3 mitos a trascender para descubrir tu Vocación)
Después y más interesante, comenzar a explicar dónde se ubica “geográficamente” la “Verdadera Vocación” que desde el “alma” se expresa en la “personalidad”. Traer el “alma al cuerpo”….Para esto tenía que empezar de cero y explicar lo que para mí más tarde sería “la base de todo lo demás”; la verdadera constitución del ser humano, lo que verdaderamente somos…
Alexis G.Ansaldo
Almamater